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Eberto García Abreu / Cuba

Crítico teatral

Nació en Placetas, una pequeña ciudad del centro de Cuba, pero vivió en Báez, un pueblo pequeño, en medio del campo, rodeado de montes, valles hermosos y montañas entrañables en la provincia de Villa Clara. Hace más de 30 años vive en La Habana. Es ‘teatrólogo’, crítico, investigador teatral y profesor; pero le apasiona la gestación y gestión de los proyectos teatrales, formativos y de impacto sociocultural. Además del teatro, le gusta la cocina, “pues también en ella uno puede inventar ficciones”, aunque cree que hay que ser totalmente sincero. 

¿Qué es lo que más le llamó la atención de España?
La belleza de algunas ciudades, la riqueza de las comidas, la mezcla y convivencia de culturas, costumbres, modos de ser y de relacionarse de personas tan diferentes como distintas son las regiones de España.  

¿Qué edificios, cosas o detalles de Cádiz le recuerdan a su tierra?
Las callejuelas  del centro antiguo, la Caleta, la presencia del mar por todas partes, la proximidad de sus gentes.  

Si yo voy a su país, no me puedo ir sin probar...
Un ajiaco criollo, un cerdo asado en púa con su arroz moro, ensalada, yuca, tostones, cerveza fría, buen postre y el café.  

Si tuviera que hacer el eslogan turístico de su país, sería...
A donde quiera que vayas… Cuba estará contigo.  

Recomiéndeme un libro o película para comprender mejor su país...
Una película, Conducta.     

Un olor que le trasladé a su país sin necesidad de coger un avión.  
La hierba fresca recién cortada.  

Una canción de su infancia.
Volver, un tango que mi padre cantaba todo el tiempo y despertó en mí el gusto por el tango.  

La misma emoción que un Madrid-Barca la tienes en…
Un juego de pelota entre Industriales y Santiago de Cuba.  

Una playa para perderse.
Ancón, en Trinidad.  

Un rincón para encontrarse.
El malecón habanero o en cualquier parte donde lo encuentres,  al atardecer,  en noviembre.

La persona de su país a la que más admira...
Son muchas, especialmente a las madres que procuran junto al pan, un trozo de felicidad cada día, sin rendirse.  

El estereotipo que más le molesta de su país es...
La bulla, el jolgorio, la ligereza sensual y la pereza.  

El equivalente al ‘killo’ gaditano es...
Muchacho, chiquillo, niño  

Aquí el Carnaval, ¿y allí?
El fin de año… o la nochebuena.  

Para terminar, ¿bailamos?
Sí, claro, me encanta bailar…